A un año del primer caso de COVID
Resaltamos el trabajo conjunto que sacó
adelante al país

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Se
llevó a cabo mayor operativo de ayuda humanitaria en la historia de la CNE
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CNE
dirigió la compra de vacunas e insumos complementarios para la vacunación
contra el COVID-19
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Se
impulsó el Modelo de Gestión Compartida Costa Rica Trabaja y Se Cuida con
enfoque comunitario
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Articuló
las instituciones para la atención de la emergencia sanitaria con un modelo
de mesas sectoriales y se definieron las alertas
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Habilitó
albergues para personas con COVID-19 en diferentes partes del país y personas
de la calle.
San José, 06 de marzo del 2021. Hoy hace un año, el
país recibía la noticia del primer caso de una persona contagiada por el
virus del Sars Cov 2 en Costa Rica.
Desde
que se dieron los primeros casos del COVID-19 en el mundo, la Comisión
Nacional de Prevención de Riesgos y Atención de Emergencias (CNE) y
las instituciones del Sistema Nacional de Gestión del Riesgo (SNGR) fueron
tomando una serie de medidas con el fin de evitar un impacto letal en el
país.
Un
año después, gracias a la robusta articulación de un Sistema Nacional de
Gestión del Riesgo conformado por la amplia participación de instituciones y
bajo la rectoría de la CNE, y al desarrollo de buenas prácticas por
parte de la ciudadanía se ha logrado atender con éxito, hasta la fecha, una
emergencia de características históricas.

Como
parte de las medias de atención, al ingresar el COVID-19 a nuestro país, la
CNE declara el pasado 08 de marzo, la condición de Alerta Amarilla para todo
el territorio nacional, con lo cual se convoca al Centro de Operaciones de
Emergencias (COE) y se activan las mesas operativas temáticas, con el fin de
movilizar recursos de manera interinstitucional.
En el marco de la
emergencia sanitaria, la CNE intervino tanto en la atención de la emergencia,
como en el impacto colateral socioeconómico que afectó a miles de familias
costarricenses.
Desde
el inicio de la pandemia, la CNE organizó el más grande operativo de
asistencia humanitaria distribuyendo alimento a más de 340 mil familias
impactadas por la emergencia mediante la coordinación con los Comités
Municipales de Emergencia, asociaciones de desarrollo, ONGs, y organización
civil.

Estos
insumos beneficiaron a familias que tuvieron disminución jornada laboral,
suspensión de contratos laborales, personas adultas mayores, personas con
discapacidad, mujeres independientes, población indígena u otras personas en
riesgo social
Para
llevar a cabo este operativo a escala nacional, la CNE adquirió las raciones
alimenticias mediante la contratación de 132 proveedores a escala
nacional y local,
quienes realizaron esfuerzos extraordinarios por elaborar los diarios en el
menor tiempo por la urgencia alimenticia que tenían cientos de
costarricenses.
La
CNE como órgano rector, también dio soporte a 43 instituciones del Sistema
Nacional de Gestión del Riesgo con el fin de dar apoyo en las labores que
realizaban funcionarios de diferentes instituciones en la atención de la
pandemia, mediante la entrega de 557.922 mascarillas
quirúrgicas, 10.316 pichingas de agua, 326 tanques para agua,
12.688 cajas de guantes, más de 29 mil litros de alcohol,
más de 30 mil litros de hipoclorito de sodio, 24.150 litros
de jabón para manos, entre otros insumos.

Además, se apoyó a las instituciones como el
Ministerio de Salud, Ministerio de Justicia y Gracia, entre otros, con la
contratación de personal especializado para la atención de la pandemia.
Asimismo,
con el fin de brindar soporte a personas positivas sin redes de apoyo, la CNE
habilitó 15 albergues en los que se ingresaron 377 personas. De
igual forma fue les dio apertura a cuatro centros para personas en situación
de calle en el cantón central de San José debido a que en las calles el
riesgo de contagio era inminente.
Para
la atención del COVID-19, se invirtieron más de 38 mil millones colones. Esto
incluye la compra de alimentos, equipos de protección y aseo, tanques para
agua, créditos para insumos alimenticios, contratación de personal, entre
otros.
Otra
de los compromisos prioritarios asumidos por la CNE durante la Pandemia, fue
el proceso de contratación de las vacunas e insumos complementarios como las
jeringas, aguas, congeladores, algodones, bolsas rojas y negras, entre otros.

Transparencia
En
aras de la transparencia, toda la información sobre los procesos de compra y
el quehacer de la CNE en la pandemia se crea disponible para el público en
general en la página web institucional y en la plataforma de Sistema
Integrado de Compras Públicas.
Alertas
un aliado para la contención
Desde
el pasado 04 de junio del 2020 la Alerta Naranja formó parte del grupo de
alertas que se establecen en Costa Rica
Con
la situación del COVID-19, la declaratoria de Alertas varió de acuerdo con
los parámetros que conlleva una emergencia epidemiológica.
Siendo
así que los criterios utilizados para el incremento en las alertas se
realizan por:
1. El
aumento en la cantidad de casos activos por cantidad de habitantes de cada
cantón.
2. Los
incrementos constantes y abruptos en cantidad de casos.
3. La
cantidad de casos positivos en los que no se ha logrado determinar nexo.
4. El
incremento en la ocupación de camas de hospital que están en condiciones de
atender pacientes con COVID 19.

Por
medio de estas Alertas se tuvo un control poblacional como medida de
contención del virus con el fin de evitar aglomeraciones, el acatamiento de
medidas sanitarias en comercios, medidas de cierre o restricción de aforos en
comercios, bares, cierre de parques y actividades de concentración
masiva.
Hasta
el momento se han presentado 35 cambio de Alertas por coronavirus.
Estas
alertas orientaron a la población a fortalecer los hábitos de cuido, ya que
los cantones que mantuvieron una condición de Alerta Amarilla tenían una
apertura controlada en movilización de vehículos y apertura comercial.
Modelo
de Gestión Compartida
Este
importante trabajo vino a fortalecerse con la implementación en setiembre del
2020 del Modelo de Gestión Compartida "Costa Rica trabaja y se cuida"
mediante el cual los gobiernos locales, Comités Municipales de Emergencia y
la ciudadanía tomaron un papel más protagónico en sus territorios.
Este
modelo vino a fortalecer las acciones del gobierno central y el trabajo
municipal con un empoderamiento de las fuerzas vivas comunitarias,
reconociendo que el país requería su reactivación económica bajo un modelo de
autocuidado y responsabilidad colectiva en cada territorio.

Para
esto, la
CNE, el Ministerio de Salud y la Caja Costarricense del Seguro Social,
establecieron mediante una autoevaluación, la ejecución del Plan Cantonal de
Prevención por COVID-19. El objetivo de este Plan fue homologar las acciones
que los gobiernos locales, junto a los CME, desarrollaron bajo un mismo
lineamiento como estrategia para el manejo y contención del virus, generando
una apertura controlada de servicios y actividades en cada cantón.
La
autoevaluación, está fundamentada en cinco aspectos generales, tales como la
organización del CME, las estrategias de comunicación, las acciones de
coordinación cantonales, las actividades de prevención, verificación y
control, y la contención y atención de la emergencia por COVID-19. A partir
de ellos, se revisan los avances y retos según el porcentaje de cumplimiento
del Plan, para disminuir la tasa de contagio.
Un
año después, este trabajo ha permitido que hay una apertura controlada, que
se ampliara el horario de la restricción vehicular y con ello la reactivación
económica del país debido a que los contagios han disminuido de
paulatinamente.
Mesas
operativas temáticas

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